martes, 23 de febrero de 2010

El deporte y la vida privada.

Todos recordamos las fotos de Michael Phelps fumando marihuana.

El ganador de 14 medallas de oro en juegos olímpicos fue la lotería para periódicos y medios de comunicación,
que estúpidamente condenaron el acto, porque un deportista, ejemplo de muchos, héroe de jóvenes, emblema de una nación, en una fiesta privada realizó ese reprobable acto, que, de no ser por los mismos medios nadie se hubiera enterado. La sociedad se traga sin rechistar las historias que los medios nos inventan y venden. 

Pensé que un deportista por ser famoso tenía la responsabilidad moral de comportarse correctamente, pero recordé que moralmente cada quien puede hacer lo que le de la gana siempre y cuando no afecte a los demás.

Phelps es un ser humano, si bien los medios lo endiosan, aún más, es joven, y después de cargar el peso de un país en sus hombros  o de que se lo hayan hecho cargar, a mi me parece que bien merecido tiene un buen churro de mota. 

Otro caso:




¿A quién le interesa la vida privada de Tiger Woods? realmente a nadie. Pero nuevamente los medios hicieron su telenovela, crearon su propia historia, y el super hombre, uno de los mejores deportistas del planeta y que más dinero gana, etc. La vida perfecta pero... Cometió un error humano.

Horas y horas de discusión por la conferencia de prensa que dio en la cual pide disculpas. ¡Pero que bien hablas Tiger, pareces político! parece como si te hubieran redactado ese texto, es más como si te hubieran obligado a decirlo. Hay mucho dinero de por medio más del que podríamos imaginar...

Nuevamente el morbo apoderándose del deporte, de los medios y de nosotros... No se podía ver un programa deportivo, realmente eran programas del corazón, comentaristas y analistas convertidos en viejas de vecindario con corbata comentando sobre Woods.

Escándalos sexuales, orgías, violaciones, trasvestis, drogas, peleas de perros, violencia, policía, asesinatos...
El circo social ya no respeta ni al deporte.

No hay comentarios: